Encontramos nuestro vagón mientras un agudo silbido suena a lo lejos. De repente, un movimiento nos empuja y comienza el traqueteo inconfundible bajo nuestros pies, miramos a nuestro alrededor y el paisaje cobra vida. Entonces tomamos asiento porque nuestro viaje ha comenzado.
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30 agosto, 2014

INFRAESTRUCTURAS: EL EUROTÚNEL

El pasado mes de mayo cumplía veinte años una de las obras de ingeniería más importantes de la historia moderna de Europa. Se trata del túnel ferroviario que cruza el Estrecho de Calais, en el Canal de la Mancha. Más de diez millones de pasajeros y cerca de un millón y medio de toneladas de mercancías toman esta ruta cada año entre la Europa continental y Reino Unido. Una infraestructura que en 1996 fue nombrada como una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno.

Los primeros planes para establecer un enlace fijo entre Gran Bretaña y el continente europeo fueron trazados por el francés Nicholas Desmeret ya en 1751 aunque sería su compatriota, el ingeniero de minas Albert M. Favier, el primero en sugerir la construcción de un túnel que uniera Inglaterra con el continente europeo en 1802. A partir de entonces numerosos intentos emergieron durante años. En 1875 la Channel Tunnel Company creada por el ingeniero británico John Hawkshaw obtendría el permiso para construir un túnel aunque entre 1882 y 1950 el Parlamento Británico rechazaría hasta diez proyectos, aludiendo principalmente cuestiones de seguridad nacional. El túnel, además, parecía no materializarse debido a la ausencia de técnicas apropiadas para su construcción. Así, en 1957, la Channel Tunnel Study Group fue establecida para abordar y dar forma definitiva a la nueva infraestructura. En los primeros estudios realizados los ingenieros revelaron que el túnel podría llevarse a cabo a través del estrato inferior del suelo, tomando sedimentos geológicos formados hace millones de años. Esta capa era menos propensa a la fractura y al colapso, conteniendo arcilla que impide la penetración de las aguas subterráneas. Finalmente, el proyecto fue lanzado de forma oficial en 1973, aunque dos años después, cuando contaba con 740 metros excavados, fue abandonado debido a la crisis de los combustibles. No sería hasta 1984 cuando por fin se abría el plazo de licitaciones para iniciar su construcción de forma definitiva tres años más tarde. La perforación empezó en el lado británico del Canal el día 15 de diciembre de 1987 mientras los franceses emprendieron las obras el 28 de febrero de 1988. El día 1 de diciembre de 1990 ambos lados se encontraron a 22,3 kilómetros de la frontera británica, a 15,6 del suelo francés.
Un total de once tuneladoras, cada una con un peso aproximado de 450 toneladas, se utilizaron para excavar los túneles. Su promedio de avance era de 426 metros por semana. En total siete millones de toneladas de roca fueron extraídas. Hasta trece mil trabajadores tomaron parte en la perforación y planificación durante los siete años que duró la obra. 
El Eurotúnel fue inaugurado oficialmente el 6 de mayo de 1994. Tiene una longitud de 50,5 kilómetros, 37,9 de ellos submarinos, lo que lo convierte en el túnel submarino más largo del mundo (con una profundidad media de 45 metros), superando así al túnel Seikan, cuya longitud bajo el agua es de 23,35 kilómetros de los 53,85 totales.
La infraestructura consta de dos túneles ferroviarios idénticos (de ancho internacional) y un túnel de servicio (de vía estrecha). Concretamente, los dos túneles ferroviarios tienen un diámetro de 7,6 metros con una separación mutua de 30. En cuanto al túnel de servicio, de 4,8 metros de diámetro, está situado entre los dos túneles ferroviarios de los que dista 15 metros. Este túnel, que conecta mediante pasajes transversales con los otros dos a intervalos regulares, se utiliza para mantenimiento y para labores de evacuación y rescate en un tiempo mínimo.
La electricidad que se suministra a los trenes y túneles, a su iluminación y a las bombas de drenaje, es proporcionada por dos subestaciones de 160 MW situadas a cada lado del túnel. Todo el sistema de transporte del Eurotúnel es automatizado y controlado desde los centros de control ferroviario (RCC), localizados en cada una de las dos terminales, disponiendo de controladores independientes para tomar el control manual en caso de fallo técnico. El sistema de señalización, llamado TVM 430, se utiliza en el interior para la transmisión de datos desde la vía al tren. En diciembre de 2009, se modernizó la infraestructura de comunicaciones del túnel. Un proyecto de 21,5 millones de euros, en el que los ingenieros de Alcatel-Lucent implementaron su solución GSM-R en el túnel a tiempo para los Juegos Olímpicos de Londres de 2012. El sistema ayuda a mejorar la seguridad de los túneles y la eficiencia de comunicación entre el RCC y el maquinista del tren, permitiendo a los pasajeros servicios de telefonía móvil e Internet en el interior del túnel.

El Eurotúnel presta servicio mediante 58 locomotoras eléctricas Brush / Bombardier, incluyendo nueve lanzaderas para coches y autobuses, quince lanzaderas de camiones o vehículos pesados y locomotoras de servicio. Las unidades eléctricas disponen de una longitud de 800 metros y cuentan con tres bogies de dos ejes motorizados. Cada lanzadera dispone siempre de dos locomotoras, una a cada lado, para completar el viaje en cualquiera de los dos sentidos. Estos trenes pueden transportar un total de 180 automóviles o 120 automóviles y 12 autobuses; en cuanto a mercancías pueden llevar hasta 28 camiones. 
El Eurostar circula a una velocidad de 300 km/h, excepto en el túnel que atraviesa el Canal de la Mancha donde lo hace a 140 km/h. Precisamente, el récord británico de velocidad en ferrocarril lo ostenta un tren de esta clase, que alcanzó los 334 km/h en el nuevo enlace de acceso al túnel del Canal, en Kent, el 30 de julio de 2003. Está en marcha un proceso de renovación del material rodante basado en trenes Velaro-D, los nuevos Eurostar 320 de Siemens, que comienzan las pruebas este año.
Eurostar, Gare du Nord
Estos servicios ferroviarios de alta velocidad a través del Eurotúnel conectan las estaciones de St. Pancras en Londres con París-Nord y Bruselas-Sur. La duración del viaje desde París hasta Londres es de tan sólo dos horas y desde Bruselas de dos horas y quince minutos. Además, esta línea para pasajeros une la londinense estación de Waterloo con la estación del Norte de París y la Midi/zuid de Bruselas con paradas en Ashford, Calais-Frethun y Lille.
El denominado Eurotúnel Shuttle es un servicio de ferrys para coches, autobuses y otros vehículos que conecta Sangatte (Calais, Francia) con Folkestone (Kent, Reino Unido) en unos 35 minutos. Asimismo, el Eurotúnel permite el transporte de camiones en vagones abiertos y otras formas de carga convencional o de contenedores. En la actualidad, cerca de 500 trenes circulan a diario por el túnel, con frecuencias de entre 15 y 20 minutos durante el día, y de 30 a 60 minutos en horario nocturno.

a su llegada a St. Pancras
Para la consecución de esta infraestructura se invirtieron un total de 14,7 mil millones de euros. El Eurotúnel fue financiado por varias sociedades privadas, sin intervención estatal, a cambio de la concesión de su explotación hasta 2052.  
Debido a la escasa demanda (tan solo el 25% del pasaje estimado y apenas una décima parte del transporte de mercancías previsto), su rentabilidad se ha cuestionado en estas dos décadas. Es más, el proyecto estuvo a punto de la quiebra en junio de 2007. Ha sido necesaria la refinanciación de parte de su deuda para enderezar el negocio y hacer frente a la competencia, fundamentalmente los vuelos de bajo coste. Un reajuste que ha llevado estos días a los responsables de este transporte a anunciar que se congelará el precio de algunos billetes y se reducirán hasta la mitad otros, en una apuesta por duplicar el número de trenes que atraviesen el canal durante los próximos cuatro años. Un plan que pretende mejorar las cifras de esta infraestructura ferroviaria que en 2013 generó un volumen de ingresos de más de mil millones de euros.


Más información: http://www.eurotunnel.com/